Ayer, cientos de personas se concentraban a las puertas de la sede de la representación de la Comisión Europea en la capital del Estado español. El mensaje quedó claro: “Merkel go home!”
Yayoflautas, gente del 15M, asambleas vecinales, personas de multitud de barrios… un amplio abanico de personas de muy distintas condiciones ideológicas mostraron ayer su descontento ante la presencia de la canciller alemana Angela Merkel. Con cánticos, gritos, y canciones irónicas, cientos de personas dieron una “calurosa bienvenida” a la alemana; con ironía y humor en muchos casos, pero sin dejar de mostrar los dientes.
Como cuenta Público, les manifestantes estuvieron coreando cánticos y frases durante una hora frente a la sede europea para luego desplazarse hasta la embajada de Alemania, donde un notable número de agentes de la Policía protegían a les que nos están arruinando. Entre las proclamas más escuchadas, la huelga general y la globalización de la lucha social fueron las más entonadas. Sin ningún incidente con la policía, la concentración terminó por retirarse no sin haber cumplido su papel: mostrar a la sociedad que gente como Merkel no es bienvenida.
No obstante, las personas allí concentradas no se fueron sin antes leer un manifiesto en el cual denunciaron los abusos capitalistas de las políticas económicas de corte neoliberal. Denunciaron que los recortes económicos no solamente son perjudiciales para las personas y las familias de a pie, sino que también suponen claros ataques a los sistemas democráticos basados en el Estado del bienestar (eso que la gente suele llamar simplemente “democracia”).
Como el mismo Público decía, la concentración fue “promovida” por asambleas del 15M y por Democracia Real YA!, sin embargo, como muestran las fotos de otres compañeres, allí hubo personas de otras condiciones ideológicas, como las Juventudes Comunistas. Es sintomático que la prensa del Estado español se limite a identificar estas protestas ciudadanas exclusivamente con el movimiento 15M, el cual es tan difuso y tan amplio que no tiene sentido hablar de “gente del 15M.” Sin menospreciar al movimiento (de hecho yo me considero parte de él), hemos de admitir que la etiqueta “15M” (cuando no la de “DRY”) se viene usando desde meses como sinónimo de “persona decente que ya está harta de la que nos está cayendo”, y quiero resaltar eso de “decente”, porque pareciera que las personas que protestamos desde un punto de vista libertario, comunista, o cualquier otra ideología política “fuerte” y “bien definida” fuéramos radicales sectarios que no reflejan a la sociedad española.
Por otra parte, los cánticos sobre la huelga general y la internacionalización de la lucha animan a pensar que al menos cierto sector de la población española está adquiriendo una mentalidad política saludable. Dejar de ver los problemas propios como marginales, poniéndolos así en un contexto global y sistémico que apunta nada más y nada menos que al sistema económico, es un gran pequeño paso que hemos de admitir. Ahora queda pasar del “el neoliberalismo es malo” al “capitalismo es malo.”
En definitiva, “Merkel go home”, “fuck the troika” y demás, pero si la Merkel se va a casa que se lleve al capitalismo con ella. De nada nos sirve protestar contra los bancos alemanes si luego nos dejamos esclavizar por los estadounidenses (por poner un ejemplo). Así, el “Merkel go home” tendría que complementarse con un rotundo “kill capitalism.”
Galería de fotos de la concentración