La autoridad y los mecanismos de obediencia, preocupaciones latentes de los estudios políticos libertarios, conforman el leitmotiv de la cinta de cine documental Le jeu de la mort (El juego de la muerte), basada en el célebre experimento Milgram, de la Universidad de Yale.
Un plató de televisión. Decenas de espectadores en vivo y otras decenas de miles en sus casas. Luces, sonido, regidores. Aplausos. La magia de lo audiovisual y una atractiva presentadora que te ordena dar una descarga eléctrica mortal a un desconocido. Y, sin saber por qué, lo haces. No hay premio en este concurso. Tampoco existe la posibilidad de hacerse un hueco en el mundo del espectáculo. Tan sólo una relación de sumisión a la autoridad.
Una veintena de voluntarios responde afirmativamente al anuncio de una conocida emisora francesa para rodar el episodio piloto de un futuro concurso televisivo. La dinámica es sencilla: la competición es por parejas elegidas al azar y una de las integrantes deberá memorizar una lista de 27 palabras y repetirlas, mientras que la otra velará por la corrección del recital y aplicará, si es el caso, un castigo en forma de descarga eléctrica cuando falle. Por ser un capítulo de prueba no habrá dinero en juego. En el resto de programas los ganadores se repartirán un millón de euros.
Lo que ninguno de los concursantes sabe es que Zona Xtrema, como será conocido el espacio televisivo, es un montaje. Un experimento en el que el concursante electrificado es el gancho y los castigadores los conejillos de indias. Ni que decir tiene que, aunque los engañados no lo saben, las descargas eléctricas son simuladas, y cada vez que se erre en una de las listas la potencia de la sanción aumentará hasta alcanzar un voltaje mortal.
Aquello que en un primer momento parece un entretenido e inocente programa de dolores juguetones, pronto se convierte en una encrucijada ética en la que los concursantes deberán elegir -entre los gritos de dolor del cómplice- si cumplir la voluntad de su humanidad o someterse a los dictámenes del programa y de la presentadora, quien continuamente les presionará para que aplique un castigo cada vez más severo.
¿Podrán los voluntarios resistir a la autoridad? ¿Cuestionarán, en base a su conciencia, las reglas de lo establecido? Un filme para reflexionar acerca de la autonomía individual y el sometimiento al poder.
Director: Christophe Nick
Año: 2009
Duración: 93 minutos
Adrián Tarín
