Nos situamos a mediados de septiembre, cuando el Estado Islámico (EI) estaba perdiendo terrenos en Iraq ante los bombardeos estadounidenses. Pero entraron en Siria y allí a EEUU no le interesa intervenir. Fue entonces que lanzaron una ofensiva contra Kobanê, un importante enclave kurdo donde el EI buscaba ganar terreno rompiendo la conexión entre los cantones Efrin y Cizire para intentar mermar las fuerzas del YPG e YPJ, las cuales fueron quienes combatieron al EI cuando estos terroristas acorralaron a los y las yezidíes en el monte Sinjar. La estrategia del EI era, a parte de cobrar su venganza contra la milicia kurda, buscar terreno donde poder respirar, ya que la pérdida de Mosul en Iraq supuso un duro golpe. Entre el 15 y el 16 de septiembre se materializó la ofensiva pensando que Kobane caería fácil ya que el desequilibrio en cuanto a armamento era considerable, pues el EI llevaba armamento pesado tomado del incompetente ejército iraquí, contra las viejas AK-47, ametralladoras, lanzamisiles, y lanzagranadas de las YPG e YPJ. Pero el EI tuvo que pagar un alto coste en bajas y sudaron la gota gorda para poder entrar en la ciudad de Kobanê alrededor del día 6 de octubre. La resistencia kurda ante los ataques yihadistas fue y sigue siendo histórica y ejemplar ante el mundo que contempla con los brazos cruzados cómo asedian el enclave kurdo.
Kobanê es una ciudad del cantón de Rojava, zona del Kurdistán sirio que proclamó la autonomía aquel 19 de julio del 2012 construyendo un autogobierno basado en el confederalismo democrático, en el cual, la sociedad kurda y las múltiples etnias de la zona convivían en armonía, justicia y libertad. La organización social pasó a las asambleas y comunas, emprendiendo también una economía basada en el cooperativismo. También hay que destacar el papel de la mujer en la sociedad, consiguiendo avances extraordinarios en la igualdad de género y su participación en los órganos de decisión, en la economía y en las milicias. Esta puesta en práctica de las ideas de Öcalan para la pacificación de los pueblos en Oriente Medio suponían una amenaza a los intereses imperialistas occidentales, lo que dio como consecuencia unas respuestas muy tímidas cuando el EI inició la ofensiva contra la población kurda. El silencio en los medios también era desolador. Solo sacaban decapitaciones de personas blancas pero no les interesaban mostrar la resistencia y la dignidad de un pueblo que se niega a caer bajo las garras del fascismo del EI.
No obstante, Occidente comenzó a mover ficha, aunque muy tímidamente, con algunos bombardeos a las posiciones del EI perpetradas por EEUU. Francia declaró que enviarían armas a los kurdos que resistieran en Siria aunque no especificaron más. Pero Turquía permanecía impasible y hasta obstaculizaba la entrada de ayuda a Kobanë bloqueando la frontera mediante el ejército, impidiendo también la huida de refugiados y refugiadas kurdas. En esos momentos, en el Kurdistán turco se vivieron numerosas protestas y disturbios en solidaridad con Kobanê y contra la posición de Erdogan respecto al conflicto, ayudando al EI y reprimiendo y asesinando a los y las manifestantes y militantes kurdos. En el resto del mundo, también tuvieron lugar protestas en varias ciudades europeas, norteamericanas y sudamericanas en solidaridad con Kobanê.
El momento más crítico de la guerra fue cuando el EI llegó a controlar el 40% de la ciudad de Kobanê, pero en pocos días el EI está empezando a perder terreno, en parte, gracias a los bombardeos de la coalición anti-terrorista liderada por EEUU. Hay que destacar aquí que el papel de esta alianza ha sido residual en la guerra de Kobanê, ya que fueron realmente las YPG e YPJ quienes están protagonizando esta resistencia tan feroz en Kobanê y quienes combatieron sin pensarlo dos veces al EI cuando acorralaron a la población yezidí. El 14 de octubre el EI perdió posiciones en el frente occidental tras un bombardeo de la coalición anti-terrorista y posterior ofensiva de las YPG e YPJ. Dos días después, el EI comienza a retirarse parcialmente de la ciudad ante las ofensivas de las YPG e YPJ.
No quiero hacerme demasiadas ilusiones, pero tampoco perder la esperanza. La situación sigue sin estar controlada y nadie puede asegurar con certeza cómo acabará todo esto. ¿Será Kobanê un nuevo Stalingrado? ¿O será como aquel Madrid caído bajo las garras del fascismo? Recordemos que las YPG e YPJ están resistiendo y atacando al EI sin prácticamente apoyo internacional y con el bloqueo fronterizo a toda ayuda por parte de Turquía, mientras el EI tiene ayuda médica e incluso armamentística por parte de Turquía. Si las milicias kurdas consiguen expulsar al EI, ¿será el inicio del avance de las YPG e YPJ hasta el nido de las águilas (léase Cuartel General del Estado Islámico) situado en Raqqa? De lo contrario, ¿qué consecuencias tendrá la caída de Kobanê? No quiero ni imaginármelo, sería otra triste y trágica historia de los pueblos como la Guerra Civil española, un pueblo en armas sin casi apoyo internacional y abandonado ante la barbarie fascista…
Sin duda la resistencia heroica de las YPG e YPJ debe ser conocida por todos los pueblos del mundo como un ejemplo de lucha y dignidad por la autonomía y la autodeterminación de los pueblos, contra el imperialismo, las monarquías petroleras, los fundamentalismos religiosos y toda forma de opresión.
Antes de terminar, os dejo unas fuentes en donde podéis seguir el conflicto kurdo: Kurdish Question, en inglés, Diagonal, en castellano y Kurdiscat en catalán.
¡Kobanê será la tumba del yihadismo! ¡Larga vida a la resistencia kurda y la revolución social! ¡No pasarán!