En Afrin, una zona rural norteña de la provincia de Alepo, Siria, los kurdos se preparan para celebrar el primer Newroz (el Año Nuevo kurdo que coincide con el equinoccio de primavera) sin la presencia del régimen de Bashar al-Assad. Sin embargo, este año esta fiesta, llena de carga identitaria, se ha vivido en un contexto especial: el país ya hace dos años que está en guerra y, además, la minoría kurda de Siria (que apuesta por la solución política en medio de la guerra siria) ha aprovechado esta inestabilidad para hacerse con el poder de sus territorios y reivindicar su identidad, reprimida desde hace casi cincuenta años.
Afrin es uno de los tres cantones en que los kurdos de Siria han organizado el territorio del kurdistán sirio, Rojava. Los otros dos cantones son Kobane y Cizire.
Finalmente los kurdos debieron entrar en guerra, tanto por la irrupción de ISIS como contra milicias yihadistas y milicias apoyadas por Turquía.
La revolución silenciosa / O. Gracià y D. Meseguer / 2013 / VOSE / Celofán Audiovisual