Desde Regeneración escribimos este comunicado para solidarizarnos por la muerte de Mame Mbaye, vendedor ambulante, cuando huía de una persecución policial en el centro de Madrid, en el popular barrio de Lavapiés. También queremos posicionarnos en nuestro apoyo a las respuestas espontáneas u organizadas que han tenido lugar desde anoche en el corazón de la ciudad, que son la expresión del rechazo a un racismo institucional y a unas prácticas inhumanas.
Desde media tarde la policía municipal de Madrid inició en la Puerta del Sol el hostigamiento a un numeroso grupo de manteros, persiguiéndoles hasta las calles del barrio de Lavapiés, concretamente en la calle del Oso, Mame Mbaye, senegalés que llevaba trabajando en Madrid 14 años, cayó fulminado al suelo tras sufrir un paro cardíaco. Según testimonio de otro vendedor ambulante que se detuvo a reanimarle, la policía les retuvo e impidió durante más de media hora que Mame fuera atendido convenientemente por los servicios sanitarios.
La respuesta inmediata de todo el barrio y de numerosas personas solidarias, entre los que se encontraban una mayoría racializada, estalló en el grito de “asesinos” hacia la policía tras constatar que ningún portavoz municipal ofrecería una respuesta clara sobre lo sucedido. La rabia creciente chocó de manera irremediable contra la reacción policial, que no fue otra que sitiar el barrio, y agredir a las personas concentradas a golpe de porra y disparando pelotas de goma. Esta misma mañana ante una concentración espontánea de decenas de senegaleses protestando por la muerte de su compañero, ha sido dispersada con graves cargas policiales en el centro de la capital. La represión se prevé que se extienda también durante esta misma tarde que hay convocada una nueva concentración en la Plaza de Lavapiés, y que será un grito de rabia contra la violencia policial.
El racismo institucional del Ayuntamiento de Madrid se lleva expresando durante muchos años en redadas a vendedores ambulantes, identificaciones a inmigrantes, o el encierro en Centros de Internamiento de Extranjeros (los conocidos como CIEs). El racismo que mucha gente tiene en su imaginario se queda en lo meramente teórico: los comentarios xenófobos o las actitudes de discriminación particulares; sin embargo el racismo está fuertemente arraigado en nuestra sociedad, y tiene una criminal representación práctica en el comportamiento institucional hacia las personas inmigrantes.
La muerte de Mame ayer por la persecución policial no es un caso aislado, no puede verse en clave coyuntural, y mucho menos puede responsabilizarse a la víctima como muchas personas acaban haciendo. Creemos que debe analizarse como la expresión de toda una ideología racista puesta en marcha por la policía municipal y el Ayuntamiento de Madrid, a pesar de todo su discurso de buenas intenciones. El posicionamiento es claro en favor de la represión contra los inmigrantes, denunciado en numerosas ocasiones por el sindicato de manteros, por lo que ni las investigaciones ni la justicia vendrá de las instituciones que planifican estas políticas represivas. Si los compañeros organizados en colectivos de inmigrantes lo tienen claro, nosotros también, les apoyaremos en lo que sea necesario para que no quede impunes estas acciones.
Que la tierra te sea leve, Mbaye. Tus compañeros no te olvidan.